Un lenguaje común; así define Luis Di Pietro a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Di Pietro fue durante el Gobierno de Cambiemos el coordinador del proyecto ODS en el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales de la Nación. «A donde vayas, todos están hablando de esto, a nivel municipal o internacional», subraya el funcionario para reforzar. Esa es la primera ventaja: un marco de trabajo compartido en distintos niveles. La otra, explica Di Pietro, es que la agenda de los ODS son temas cuya relevancia no está bajo discusión. Los ODS abarcan cuatro dimensiones: económica, social, ambienta e institucional. «Dan una mirada amplia, integral», destaca en entrevista con Visión Desarrollista.
Di Pietro tiene una larga experiencia en la gestión pública. Durante la gestión de Cristina Fernández trabajó en la adopción de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), los antecesores de los ODS. El nuevo marco impulsado en 2015 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pone el énfasis en la sustentabilidad. «Los ODS son una invitación a pensar políticas de largo plazo y poner en el centro la sustentabilidad. Es el tema que hoy está vigente para gobiernos, ONGs, organismos, sociedad civil. Los jóvenes hablan de estos temas, como el uso racional de los recursos y pensar en las generaciones futuras”, apunta.
¿Cómo promover las energías renovables? ¿Cómo cuidar el agua? ¿Cómo lograr la equidad de género? Estos son algunos de los temas que pone en agenda los ODS y que sirven como plataforma para pensar un proyecto de país. «Dan un marco común que permite superar las diferencias entre partidos y la sociedad. Son temas transversales a la política que están en sintonía con la agenda global», señala el funcionario. Aunque aclara que los ODS no resuelven la falta de claridad estratégica de los países. «Son objetivos muy instrumentales, de corto y mediano plazo. En Argentina falta una visión de largo plazo, pensar a 50 años, trazar las grandes líneas estratégicas, las prioridades para un plan de desarrollo», afirma Di Pietro.
Vincular los ODS a los lineamientos del país
Como coordinador del proyecto ODS, Di Pietro fue el responsable de analizar cada uno de los objetivos de las metas definidas en la agenda de la ONU en función de las prioridades del país. En 2015, cuando se definieron los ODS, Argentina solo contaba con un Plan Estratégico Territorial (PET), explica Di Pietro, que era un plan de la infraestructura que no incluía los aspectos productivos ni ambientales. El gobierno de Mauricio Macri definió en 2016 ocho grandes objetivos y 100 prioridades de gobierno, lo que dio un marco nacional para alinear los ODS. «Los ministerios tomaron las metas priorizadas por nosotros, pero la verdad es que ellos definieron sus prioridades de acuerdo a los programas que ya tenían en marcha», precia.
A nivel regional, Di Pietro destaca que otros países como Perú, Colombia y Ecuador tienen planes estratégicos. «Que después lo cumplan es otro asunto», aclara y subraya la importancia de que al menos hayan establecido un marco de acción claro, algo que Argentina no tiene. «En ese sentido, los ODS puedan ser gravitantes para la concreción de un proyecto de desarrollo sostenible», plantea.
